Desde hace algunos años, y como respuesta a lo que se intuía como uno de los Signos de los Tiempos, la Compañía Misionera comenzó a dar pasos para COMPARTIR CARISMA, ESPIRITUALIDAD Y MISION CON LAIC@S. Desde entonces se ha hecho camino.
Compartimos el Carisma y la Espiritualidad con los Laic@s, sabiendo que esto conlleva a que ambas partes, acojan el reto de testimoniar con claridad la identidad Religiosa o Laical de cada un@, por tratarse de vocaciones diferentes.
Entendemos que la Misión es compartida no por participar en las mismas tareas apostólicas, sino cuando unas y otras ponemos en común la experiencia de misión que nos toca vivir. Es ahí donde se revelan los rasgos del Carisma, percibidos por cada una con matices propios, desde los dones personales que ha recibido. Es importante compartir la Espiritualidad con la que vivimos la misión.
Creemos que compartir el Carisma y la Espiritualidad, requiere comunión de vida y sentimiento desde vocaciones y opciones diferentes. Los modos de esta comunión serán variados según personas y circunstancias: encuentros ocasionales o sistemáticos, acompañamiento personal, o formar parte de una comunidad por un tiempo determinado. Lo que es imprescindible es que a través de la relación se de una Comunión Real entre cada laic@ y la Compañía Misionera.